Rexi, la Golden Retriever, era apenas una cachorrita de seis semanas de edad cuando sus dueños notaron algo muy inusual en ella.
La perra se diferenciaba del resto de la camada en que prefería caminar sobre sus patas delanteras y no caminaba.
Bueno, resultó que esas piernas estaban creciendo hacia atrás.
Su mamá y su papá se negaron a darse por vencidos con ella y comenzaron un GoFundMe para ayudar a hacer lo que fuera necesario para curarla. ¡Y acabó alcanzando su objetivo!
Esta generosidad permitió que a Rexi le pusieran un prototipo de mono que la ayudaría a correr con comodidad mientras trabajaban en su aparato para caminar.
Gracias a todos los donantes de buen corazón y a los propietarios decididos, ¡Rexi podría vivir la mejor vida posible en el futuro!